LA CÁMARA FOTOGRÁFICA.
Una cámara fotográfica no es más que una máquina donde se
capturan de forma permanente las imágenes mediante las irradiaciones de la luz
de los objetos sobre elementos fotosensibles. Cualesquiera que sean los tipos o
modelos de cámara, debe ser esencialmente
hermética a la luz, con elementos
fotosensibles en su interior (película o sensor digital) y un agujero que
permita que el paso de la luz incida
sobre la película (sensor digital), esta luz es enfocada hasta la película por
unos dispositivos o lentes ópticos (objetivo), conformándose una imagen de lo
que está delante de la cámara. La cantidad de luz entrante en la cámara es
controlada por el tamaño del agujero y la duración del tiempo en que permanece
abierto (exposición). En la parte superior de la cámara existe un visor que
permite seleccionar el área que ha de incluirse en la fotografía. Este es
simplificadamente el funcionamiento de las cámaras fotográficas, a partir de
estos elementos, todos los otros dispositivos que se le añadan o se agreguen
pueden aumentar la calidad de la toma fotográfica o la aplicabilidad de
diferentes funciones en las cámaras.
Exposición Fotográfica: Acción de someter un elemento fotosensible (en cámaras
digitales el sensor y en las analógicas la película fotográfica) a la acción de
la luz, que, es la piedra angular de la fotografía. Por tanto, la correcta exposición
de una fotografía será el primer paso para lograr una buena foto, al margen de
una mejor o peor composición y de una mayor o menor belleza de lo retratado.
Por consiguiente, una mala exposición será el primer gran error que se debe
evitar cuando se hagan fotografías.
En función del grado de exposición de una foto se puede
hablar de tres situaciones: subexposición, exposición y sobreexposición.
- Subexposición: La fotografía presenta una carencia considerable de luz frente a la de la escena original. En pocas palabras, la fotografía "está oscura".
- Exposición correcta: La fotografía recoge la cantidad de luz apropiada para representar fielmente la escena fotografiada.
- Sobreexposición: Se aprecia un exceso de luz en la fotografía frente a la escena retratada. De forma simple, la fotografía "está demasiado clara ".
Los 3 Factores que Determinan la
Exposición
- Apertura del diafragma. Determina la cantidad de luz que se deja incidir sobre el sensor de la cámara. Una mayor apertura supondrá una mayor cantidad de luz actuando sobre el sensor.
- Velocidad de obturación o tiempo de exposición. Marca el tiempo durante el que la luz incide sobre el sensor. Un mayor tiempo y, por tanto, una menor velocidad darán lugar a que la luz incida durante un periodo más prolongado sobre el sensor.
- Sensibilidad ISO. Refleja lo receptivo que se muestra el sensor de la cámara ante la luz que actúa sobre él. Una mayor sensibilidad hará que, a igual cantidad de luz y tiempo de incidencia, el sensor se haya excitado más y, por tanto, la fotografía tenga una mayor exposición.
Relación entre los factores
determinantes
Esta relación hace que unos parámetros puedan
"compensar" la acción de otros y lograr que configuraciones con
distintos valores de los tres parámetros puedan originar una misma exposición.
Estas relaciones precisamente permitirán que siempre se tenga la posibilidad de
obtener una foto en condiciones de correcta exposición, si se aplica
correctamente la relación entre estos factores. De ahí la importancia de
conocerla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario